El habla cartagenera es una cualidad propia de esta ciudad; habla comarcal donde nos reencontramos con las tradiciones y las formas llevadas a la palabra del propio cartagenero. Un léxico propio construido por localismos, préstamos del catalán y aragonés (repobladores de esta tierra), raíces árabes de los que estuvieron antes, castellanismos, vulgarismos, extranjerismos y trozos del calé gitano; todo regado con el seseo de efesé. Y desde ayer, del croata.
Este “habla” propia se ha tratado en varias publicaciones y se ha conocido más en profundidad y difundido gracias a autores como Ángel Serrano Botella y su ‘El Diccionario Ícue. Habla, tradiciones y costumbres cartageneras’, el ‘Estudio sobre el habla de Cartagena y su comarca’ (1959), de Emilia García Cotorruelo o ‘El habla de Cartagena’ (1960), de Ginés García Martínez. Algunas obras de gran rigor filológico, otras algo menos profundas pero más accesibles, como la propia de Serrano o el ‘Diccionario cartagenero’ (2006) de Diego Martínez de Ojeda. Todas recomendables, y que después de la presentación de Toni Datkovic ayer, habrá que revisar y actualizar debidamente.
Ayer, el habla cartagenera sumó otra fuente de llenado, esta vez adoptando la expresión croata ‘tener la Gallina de pelo’; que viene a significar “llegar a un sitio donde estas encantado de estar”.
Y es que gusta aquí ver así de emocionado por volver a tío ‘más duro que Maíquez’ y con ‘más cojones que Gavira’, que cuando juega con la ‘cuerpoelástica’ del efesé, va ‘cabreado de irse al muelle’. Que oye, que el ‘pistolica’ este no es un ‘pijicas’, aunque ayer se emocionara al volver a nuestro estadio y dio hasta un poco de pena verlo ‘hacerse carbonato’ por un momento. Y es que hay ‘ver menos que Pepe Leches’ y estar muy ‘abombao’ para no darse cuenta de que fichar un central de la categoría de Datkovic no es una ‘chuminá’, que estamos deseando verlo repartir ‘casques’ y dar ‘crujíos’ en vivo en el Cartagonova…pero que este jugador ya es más que eso, ya es un cartagenero más que nos ha ‘cogido el caire’ a los efesistas en apenas seis meses. Y es que este cartagenero nacido en Zagreb está muy ‘colaico’ por Cartagena. Y a nosotros nos tiene dando ‘perigallos’ desde que decidió volver aquí, a su casa. Que vamos, que nos lo imaginamos sin ninguna dificultad sacando la línea de cuatro atrás al grito de ‘¡afurí!’
Quién nos lo iba a decir a nosotros, esta afición ‘más cabrona que San Marcos’ que alguien venido ‘del quinto pijo’ nos iba a querer así; este en nada sale a ‘coscoletas’ del Cartagonova.
Que nosotros también te queremos a ti, sicario.
blogefesista 